En las aplicaciones de hidrógeno, no se admiten concesiones en cuanto a la seguridad. Dos factores son especialmente relevantes en este caso: la seguridad de funcionamiento y la protección antideflagrante. El nivel SIL (Safety Integrity Level) de un terminal de válvulas muestra la fiabilidad con la que gestiona las funciones críticas. La clasificación en zonas de explosión es decisiva para determinar qué medidas de protección son necesarias debido a las condiciones ambientales. Certificaciones de protección antideflagrante como IECEx o directivas regionales como ATEX, CCC u otras respaldan la selección de componentes. Un terminal de válvulas que cumpla los requisitos específicos de la aplicación crea seguridad en la planificación y evita retrasos en la certificación o el funcionamiento.
En las aplicaciones de hidrógeno, no se admiten concesiones en cuanto a la seguridad. Dos factores son especialmente relevantes en este caso: la seguridad de funcionamiento y la protección antideflagrante. El nivel SIL (Safety Integrity Level) de un terminal de válvulas muestra la fiabilidad con la que gestiona las funciones críticas. La clasificación en zonas de explosión es decisiva para determinar qué medidas de protección son necesarias debido a las condiciones ambientales. Certificaciones de protección antideflagrante como IECEx o directivas regionales como ATEX, CCC u otras respaldan la selección de componentes. Un terminal de válvulas que cumpla los requisitos específicos de la aplicación crea seguridad en la planificación y evita retrasos en la certificación o el funcionamiento.
Un terminal de válvulas sólo despliega todas sus capacidades cuando se comunica sin problemas con el sistema de control existente. Las interfaces como PROFINET o EtherCAT® garantizan una integración perfecta del sistema. Al mismo tiempo, la opción de integración de las E/S descentralizadas ofrece más flexibilidad, especialmente en sistemas extensos o cuando hay que combinar control centralizado y descentralizado. Es fundamental que su terminal de válvulas disponga de las interfaces adecuadas para respaldar su arquitectura actual y futura.
Las válvulas proporcionales son indispensables para aplicaciones que requieren un control de caudal o presión preciso. Un terminal de válvulas que permite su integración reduce el espacio necesario y simplifica la instalación. Además, el control centralizado a través del terminal de válvulas aumenta la reproducibilidad de los resultados y simplifica el mantenimiento, ya que hay que supervisar y sustituir menos componentes individuales. Los operadores se benefician de una solución compacta y eficaz que favorece tanto la precisión técnica como la seguridad funcional a largo plazo.
Las condiciones a lo largo de la cadena de valor del hidrógeno suelen ser extremas: desde temperaturas bajo cero en el exterior hasta altas temperaturas en los procesos de compresión, los requisitos son variados. El terminal de válvulas debe estar diseñado para que funcione de forma fiable en las condiciones específicas de la aplicación. Una cuidadosa selección evita fallos y crea la base para un funcionamiento estable y seguro.
Los terminales de válvulas pueden ser mucho más que simples componentes de conmutación. Las funciones integradas de diagnosis y control permiten detectar fugas, desviaciones o desgaste en una fase temprana. Esto da a los operadores más transparencia sobre el estado y los procesos del sistema y les permite intervenir de forma selectiva antes de que se produzca un fallo. Esto garantiza una alta disponibilidad de los sistemas y bajos costes de mantenimiento.
La selección del terminal de válvulas adecuado es crucial para la fiabilidad, seguridad y eficiencia de las aplicaciones de hidrógeno. No existe una solución estándar: cada aplicación tiene sus propios requisitos de seguridad, resistencia a la temperatura, integración y supervisión. Tener en cuenta estos criterios reduce riesgos, evita fallos y sienta las bases de una automatización preparada para el futuro.