Las eMotionSpheres muestran cómo varios objetos voladores pueden moverse de manera coordinada en un espacio aéreo definido. Aunque lo hagan de manera individual o colectiva, no hay colisiones, incluso en situaciones caóticas, ya que las esferas se esquivan unas a otras con la ayuda de patrones de comportamiento introducidos.
Diez cámaras instaladas en el espacio detectan las esferas a través de sus marcadores infrarrojos activos y transmiten estos datos de posición a un ordenador central. Las acciones que calcula el ordenador central se envían a las esferas y se ejecutan de manera descentralizada. La interconexión inteligente crea un sistema de control y monitorización que podría utilizarse en la fábrica interconectada del futuro.
Cada una de las ocho esferas tiene un diámetro de 95 cm y está llena de helio. Cada una de ellas se impulsa con ocho pequeñas hélices unidas a su cubierta exterior. Los actuadores son adaptivos y proporcionan el mismo empuje eficiente hacia adelante y hacia atrás, lo que es una verdadera innovación en objetos voladores.