Una unidad de control neumática funciona con aire ambiente comprimido, el llamado servicio de aire comprimido. Dado que las unidades de control neumáticas son muy resistentes a las influencias ambientales externas, pueden utilizarse para el control técnico en muchos campos de aplicación diferentes.
La utilización de aire como fluido de trabajo es el fundamento técnico de la neumática. En las aplicaciones neumáticas, el aire comprimido se utiliza para transmitir y controlar la energía. Los controles se componen de una unidad transmisora de la potencia y de un sistema de control. El control registra todos los procesos y los procesa posteriormente. Las señales de salida que se transmiten durante el procesamiento posterior controlan el comportamiento de los elementos de accionamiento que están conectados al controlador. Algunos ejemplos de elementos de accionamiento son los motores o los cilindros neumáticos.
El uso de sistemas de control neumáticos ofrece diversas ventajas, entre ellas que el medio de trabajo, el aire, conlleva intrínsecamente pocos factores de riesgo y costes. La siguiente lista ofrece una visión general de las ventajas más importantes:
Si se compara directamente con una solución hidráulica, los sistemas y controles neumáticos son a menudo más ventajosos, ya que el aire comprimido suele estar disponible en las instalaciones de producción de todos modos y los sistemas neumáticos, después de accionar los actuadores, no requieren recirculación de aire.
Los controles neumáticos que utilizan aire también han demostrado ser, a menudo, más fiables que las tecnologías de control de motores eléctricos que dependen de la electricidad.
La tecnología de control neumático y el sistema neumático asociado se utilizan en muchas industrias y sectores para diversas aplicaciones. Para ello se emplean diferentes versiones de los sistemas, por ejemplo, para apoyar máquinas herramienta, líneas de producción automáticas, herramientas de elevación o pinzas mecánicas. Aquí encontrará un resumen de los ámbitos de aplicación más comunes:
Las unidades de control neumáticas también pueden utilizarse en el suministro de agua, en las puertas de los trenes o, incluso, en la investigación nuclear. Estos controles han cambiado la forma de hacer negocios de muchas empresas. Muchas industrias, como la fabricación o el transporte, pueden funcionar de manera más eficiente gracias a la disponibilidad de aire comprimido controlado de manera específica.
Este contador neumático es apto para montar en un panel frontal y puede restablecerse neumáticamente. Opcionalmente con tapa protectora para recuentos hasta un valor preseleccionado o recuento aditivo continuo. El contador suma señales neumáticas desde cero y envía una señal neumática de salida cuando se alcanza el número preseleccionado. Presionando el pulsador de bloqueo blanco y tecleando simultáneamente el valor de preselección, se preselecciona el contador (el número preseleccionado es visible permanentemente en la ventana de preselección). Una vez preseleccionado este número, se mantiene al restablecer el contador. Durante el funcionamiento también es posible corregir el valor predeterminado. Las cantidades de piezas acabadas o las unidades de tiempo transcurridas pueden leerse sin necesidad de recalcular.
Este temporizador neumático es ideal para aplicar retrasos de conmutación. El temporizador también dispone de un tornillo de ajuste y un indicador visual. Al término del tiempo de retraso ajustado, el temporizador conmuta la presión de entrada aplicada en la primera conexión a la aplicada en la segunda conexión. La unidad de reposición se utiliza para restablecer automáticamente temporizadores de los tipos PZVT-...-SEC una vez transcurrido el tiempo preseleccionado y para generar una señal de salida de una longitud definida para fines de control. Tirando del pomo ajustable de la unidad de reposición es posible restablecer manualmente el temporizador. De este modo, pueden realizarse muy fácilmente controles de tiempo neumáticos con intervalos de tiempo que se repiten automáticamente.