Hasta ahora, se tardaba de dos a cuatro días en averiguar qué antibiótico funcionaba y en qué dosis contra una infección concreta de un paciente. Una nueva plataforma de diagnosis encuentra el preparado adecuado en 24 horas. Incluye: cabezas de dosificación y pórticos de Festo.
La resistencia bacteriana a los antibióticos es una de las amenazas sanitarias más mortíferas y costosas del mundo, según una agencia del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos. Dicha resistencia es promovida, entre otras cosas, por aquellos médicos que recetan antibióticos fuertes de amplio espectro durante días. Cada vez que se emplean de estos potentes antibióticos, se ofrece a las bacterias la oportunidad de desarrollar resistencias.
Esta es una de las causas de que las pruebas diagnósticas utilizadas para personalizar la terapia antibiótica suelan durar tres o más días. Para resolver el problema, hay que fomentar terapias precisas y más rápidas.
Con una tecnología innovadora desarrollada por la start-up SeLux Diagnostics, el tiempo se reduce a menos de 24 horas en el 99 % de los casos, pudiendo llegar incluso a cinco horas. Los médicos pueden prescribir el tratamiento óptimo entre tres y cinco días antes, lo que acorta las estancias hospitalarias y rompe el ciclo del uso excesivo de antibióticos y la resistencia a los mismos.
La solución que ofrece SeLux consiste en una plataforma denominada Next Generation Phenotyping (NGP), que significa "fenotipado de próxima generación". En este contexto, por fenotipado se entiende el proceso que proporciona información completa sobre qué terapias pueden tratar eficazmente la infección de un paciente.
En la plataforma NPG, el plasma sanguíneo del paciente u otras muestras que contengan la bacteria se mezclan con los distintos antibióticos. Al utilizar microplacas de 384 pocillos, el sistema tiene la capacidad de analizar fármacos actuales y también futuros. Los resultados del análisis exhaustivo se envían a una base de datos. Un algoritmo comprueba cada dilución del antibiótico y analiza así cuál es el fármaco y con qué dosis que mejor responde.
En el sistema se han instalado varias cabezas de dosificación y pórticos de manipulación de Festo. Con las cabezas de dosificación VTOE y VTOI se puede conseguir una dosificación precisa en el ámbito de los microlitros. Esto mejora el rendimiento y garantiza la fiabilidad y la precisión. El módulo de control de válvulas VAEM permite controlar con precisión las cabezas de dosificación.
La plataforma NPG incluye, además, el pórtico de manipulación EXCM-30, que mueve las placas microtituladoras y las cambia de sitio. El módulo de sujeción y giro EHMD agarra y gira los viales y abre o cierra las tapas. Por ello, resulta ideal para manipular muestras de pacientes.