Las plantas de fabricación de automóviles son, hoy por hoy, el mejor ejemplo de procesos altamente automatizados. Desde el tornillo más diminuto hasta la chapa más grande, desde el primer segundo de los procesos de fabricación hasta la última prueba de funcionamiento del motor hay miles de pasos que deben estar perfectamente coordinados entre sí. En la medida en que progresa la automatización, continúa mejorando la calidad de los productos. Cuanto más seguros y fiables son los procesos, tanto más disminuyen los costes destinados a trabajos de mantenimiento u ocasionados por la paralización de las máquinas.

Por lo tanto, el aumento de la fiabilidad de los procesos es un argumento importante para una empresa como NSM Magnettechnik GmbH, fabricante de sistemas de transporte adaptados a las especificaciones de sus clientes. Se trata de un importante proveedor de los fabricantes de automóviles más importantes del mercado. En un sistema utilizado para apilar chapas, los expertos de NSM confían en la combinación de cilindros normalizados DSBC y válvulas VUVG con amortiguación de ajuste automático PPS. Esta solución que se entregó lista para su instalación, incluye 500 cilindros que funcionan simultáneamente, ejecutando movimientos sincronizados y amortiguados con precisión.



Recorridos pequeños, grandes resultados
Muchas veces se obtienen resultados importantes con soluciones aparentemente insignificantes. Por ejemplo, con la conmutación de cilindros neumáticos en un sistema para apilar placas de chapa. Si esas chapas han de transformarse posteriormente en impecables partes exteriores de automóviles (techos, puertas, capós, tapas de maleteros), no solamente es importante su corte preciso.

También deben evitarse errores al apilarlas. Basta que uno solo de los 500 cilindros neumáticos se mueva en el momento equivocado o que su recorrido sea diferente al de los demás, para que se produzcan defectos en las chapas que incidirían en la calidad del producto final. Antes, la operación de separación de las chapas transportadas magnéticamente estaba a cargo de cilindros DNCB con amortiguación PPV de ajuste manual. Utilizando los nuevos cilindros DSBC con amortiguación de ajuste automático PPS, fue posible aumentar considerablemente la fiabilidad de los procesos.