Con la ayuda de los sistemas CAD, los diseñadores y los arquitectos diseñan y construyen productos y edificios en el espacio virtual. En la simulación, las formas y las estructuras complejas salen de la cabeza del creador para hacerse visibles también en la pantalla. No obstante, las formas más atrevidas son componentes especiales difíciles de construir de manera automatizada y, por tanto, muy caros de ejecutar. Para, por un lado, permitir la variedad creativa y, por otro, poder fabricar de manera rentable, se requiere un método de construcción que una ambos requisitos.
Por eso, a comienzos de la década de 1970 se desarrollaron sistemas CAD paramétricos para la construcción de maquinaria y vehículos que en su mayor parte se podían utilizar de un modo intuitivo. El modelo de producto ya no es una geometría almacenada de manera exacta. Su forma se guarda en el ordenador mediante una combinación de parámetros y variables numéricas para la descripción del tamaño. Por ejemplo, un objeto con forma de cubo se define a través de los parámetros longitud, anchura y altura, y un cilindro por el diámetro y la altura.
La digitalización de los procesos de la planificación y la ejecución incrementa la rentabilidad. Los modelos geométricos secuenciados son mucho más baratos que los componentes especiales fabricados de la manera habitual. Se consigue reducir la diversidad de los componentes y hacer más sencillas las geometrías y los detalles sin necesidad de simplificar la forma general. Al contrario: cuando los modelos están almacenados en el ordenador, es posible hacer modificaciones en el diseño directamente en la pantalla, simplemente cambiando los valores numéricos o la combinación de los parámetros. Para ello se usa un software 3D que se emplea también en la creación de animaciones.
Fabricación digital: el software transmite la geometría de la estructura directamente a las trayectorias de desplazamiento de la cinemática de barras
Los nuevos métodos para la impresión 3D son la herramienta perfecta para la realización de las formas diseñadas de modo paramétrico. Con el 3D Cocooner, Festo mostró en la Feria de Hannover una aplicación prototípica para el sistema de manipulación de Festo, una cinemática de barras del tipo EXPT-45. Tomando como modelo el capullo del gusano de seda, una tobera hiladora crea libremente en el espacio estructuras ligeras a partir de haces de fibras de vidrio revestidas y estabilizadas con resinas de curado UV.
La unidad de manipulación que guía la tobera hiladora se controla directamente desde el software de diseño. Una interfaz de usuario sencilla e intuitiva permite crear infinitas variantes a partir de patrones básicos muy simples.