En el ámbito del Mantenimiento, existe una tendencia creciente a la optimización de recursos y a la planificación de actividades. De ahí la necesidad de una actualización constante de las cifras delegadas para gestionar los distintos aspectos del proceso de mantenimiento.
El supervisor de Mantenimiento es responsable de:
Garantizar la continuidad de la producción y el rendimiento de las plantas, mientras se encarga de aplicar las políticas de mantenimiento de la empresa y aportar propuestas para mejorarlas. Organiza el trabajo de tus colaboradores y empresas externas. Desarrollar las habilidades de los técnicos de mantenimiento hacia la versatilidad y la especialización.
Al finalizar el curso el participante será capaz de:
Mejora el rendimiento del servicio de mantenimiento.
Aumenta el nivel de integración con otras funciones empresariales.
Garantiza y certifica el nivel de competencia del jefe de equipo.
Aplica el conocimiento intercambiado con líderes de equipo de otras empresas (benchmarking).
Fomenta y apoya el crecimiento profesional del personal.
Calificación profesional.
Captar ideas, reflexiones y consideraciones para ser aplicadas en la propia realidad operativa.
Podrás discutir con expertos y profesionales del sector.
Mantenerse al dia con las técnicas y metodologías modernas.
¿Cuáles son las habilidades necesarias para llevar a cabo estas acciones?