A nadie le gusta ir al dentista, y menos aún a los niños pequeños. Para facilitar a los futuros dentistas y asistentes dentales el trato con los niños durante el tratamiento odontológico, la empresa japonesa tmsuk ha desarrollado un robot humanoide que simula de forma realista el comportamiento de los niños pequeños durante estos tratamientos, incluidos el movimiento inquieto, los sobresaltos o el cierre de la boca. Los movimientos realistas del maniquí se generan mediante reguladores de presión proporcionales con tecnología piezoeléctrica.
Casi nadie se lo espera: durante muchos tratamientos dentales, los niños pequeños pueden sufrir una bajada de tensión, sobresaltos o pérdida de conocimiento e, incluso, llegar a estados físicos muy críticos. Por ello, es aún más importante que la formación de los dentistas y auxiliares dentales les prepare para la inquietud y el miedo de los niños pequeños durante el tratamiento dental. Así, el uso de un robot de simulación es más que razonable, ya que no es posible utilizar personas vivas para la enseñanza de la odontología y la cirugía oral.
La empresa japonesa tmsuk ya ha lanzado al mercado una gama de robots de servicio, como robots de transporte y robots para el cuidado de ancianos. Al igual que muchos robots clásicos, todos están equipados con ejes eléctricos. Ahora, la empresa prosigue su andadura en el campo de la simulación médica con robots pedagógicos. El robot llamado Pedia_Roid se emplea para simular a niños pequeños sometidos a tratamientos dentales, mide 110 cm y pesa 23 kg, lo que equivale al peso de un niño de cinco años.
El Pedia_Roid es neumático, ya que los estudiantes y aprendices a veces tienen que sujetar las extremidades del maniquí robótico durante las simulaciones de tratamiento. En los actuadores eléctricos, esto podría dañar el reductor y los husillos. En este caso, la neumática es más robusta y flexible que la tecnología de actuadores eléctricos.
Movimientos suaves con tecnología piezoeléctrica. Los movimientos suaves y realistas solo son posibles con la tecnología piezoeléctrica. Esta tecnología es la base de los reguladores de presión proporcionales VEAA y VEAB de Festo utilizados en el robot. Controlan la mayoría de los 24 cilindros neumáticos del robot, que proporcionan los movimientos aparentemente reales de brazos, piernas y dedos, así como de la boca, los párpados y el iris. Silenciosos y de bajo consumo de energía, los reguladores proporcionales de presión permiten simular comportamientos similares a los humanos. A diferencia de las electroválvulas neumáticas clásicas, no emiten ningún chasquido al conmutar, ya que el transductor de flexión se mueve libremente y sin ruidos de impacto.
"Sin la tecnología piezoeléctrica utilizada por Festo en los reguladores de presión proporcional, no habríamos podido realizar este robot humanoide", explica Yusuke Ishii, director de tmsuk. Los reguladores de presión proporcionales VEAA/VEAB son válvulas de 3/3 vías con sensor de presión y electrónica de mando. En comparación con las electroválvulas, las válvulas proporcionales con tecnología piezoeléctrica prácticamente no necesitan energía para mantener el estado activo gracias a su principio capacitivo. La válvula piezoeléctrica funciona como un condensador: solo necesita corriente en el arranque para cargar la piezocerámica. Para mantener su estado no se necesita más energía. En consecuencia, las válvulas tampoco se calientan. Las válvulas piezoeléctricas consumen hasta un 95 % menos de energía que las electroválvulas, que requieren una corriente eléctrica permanente.
Gracias a su diseño, los reguladores de presión proporcionales VEAA/VEAB son resistentes al desgaste y alcanzan un elevado número de ciclos. Los VEAA y VEAB ofrecen grandes ventajas en aplicaciones de regulación de presión con un bajo o muy bajo consumo de aire en los cilindros, así como en aplicaciones que requieren una gran dinámica, como los robots Pedia_Roid. El diseño compacto de estas válvulas proporcionales combina una montaje que ahorra espacio con un peso propio reducido.
Los primeros 50 robots del mundo para la enseñanza de la odontología están en fase de planificación de la producción antes de emplearse en universidades y facultades de Japón, el Sudeste Asiático y Oriente Próximo. Le seguirán otras regiones del mundo.
Acerca de tmsuk:
La empresa japonesa tmsuk company limited se ha propuesto desarrollar robots de servicio que ayuden a las personas en entornos médicos y en zonas catastróficas. La empresa con sede en la isla Kyushu, la más al sur de las cuatro islas principales de Japón, fue fundada en 2000 y cuenta con 24 trabajadores y una filial en Taiwán.